𝐂𝐀𝐒𝐎 𝐏𝐎𝐏𝐄: 𝐉𝐔𝐒𝐓𝐈𝐂𝐈𝐀 𝐂𝐎𝐑𝐑𝐄𝐍𝐓𝐈𝐍𝐀 𝐅𝐈𝐉𝐎́ 𝐏𝐎𝐑 𝐏𝐑𝐈𝐌𝐄𝐑𝐀 𝐕𝐄𝐙 𝐔𝐍 𝐑𝐄́𝐆𝐈𝐌𝐄𝐍 𝐃𝐄 𝐕𝐈𝐒𝐈𝐓𝐀𝐒 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐔𝐍 𝐏𝐄𝐑𝐑𝐎 - Carolina Macarrein

 

Uno lo toma con humor frente a las cuestiones que se nos presentan habitualmente que son realmente

complejas y tristes. Pope nos alegra un poco. Nosotros en el entendimiento decidimos que debía ser

un caso atendido por la Justicia. 

Pope es un perrito salchicha que tiene un año y dos meses. Fue recibido en una familia cuando una

pareja accedió a tenerlo. Ellos se separan por problemas de convivencia. El perrito se quedó con el

papá. 

Transcurrido un tiempo, la señora se presenta y pide una medida cautelar del derecho de comunicación

con Pope. Es decir, poder verlo. Además, señaló que la abuela (su mamá) y toda la familia estaban

afligidos por la situación. 

Ellos piden concretamente poder visitar al perrito. Lo pensamos y discutimos porque para el Código

Civil el perrito es una cosa. Para el derecho penal hoy, con la ley de protección, es un ser sintiente.

Pero, desde el derecho de familia, son seres afectivos. Son seres humanos que no son personas, pero

tampoco cosas. 

Acá no estuvo en discusión quién es el dueño del perro. Desde ese lugar habilitamos el régimen

provisorio de comunicación hasta tratar la cuestión legal. Es una medida cautelar. En la audiencia

veremos las otras cuestiones. 

Este es el primer caso del país en el que se establece un régimen de visitas para perros. Si se dio en

acuerdos de divorcios la distribución de bienes en donde se ponían de acuerdo las partes para ver con

quién quedan los animales.